viernes, julio 23, 2010

¡Un helado! No, medio helado.

Hay un helado en el congelador. Dos personas: una sabe que en el congelador está el helado, la otra no. Sin embargo, cuando el primero se dispone a comer el helado, al segundo le entran ganas de que se divida entre los dos. ¿Por qué?
Esta situación y similares son muy habituales. Personas que desconocen la existencia de algo que les pertenece, que pueden vivir felices sin ello, pero que cuando son conscientes de que está ahí, les surge la necesidad y el interés por el mismo privándote a ti de su disfrute pleno.
Los motivos por los cuales actuamos así se me escapan, pero yo me quedé sin "mi" medio helado.
¿Alguien sabe por qué?


Sigo pensando...

No hay comentarios: